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La marca japonesa reveló la nueva generación de motocross, cumpliendo cincuenta años del lanzamiento de su primera moto de offroad, la CR 250 R Elsinore de 1973.
Más allá de que actualmente la CRF 450 no tiene nada que ver con la CR 250, Honda hace un guiño a su historia por el medio siglo de motocross, con la gama 2023. Las CRF aparecieron en 2002, con motores cuatro tiempos para ir eliminando las dos tiempos originales pocas temporadas después. La decoración tiene funda de asiento azul y llantas doradas, como las CR campeonas del mundo en Motocross y AMA en la década del 80, conducidas por Eric Geboers, Ricky Johnson y otros.
En la parte técnica, la nueva CRF 450 trae cambios en el chasis, con una rigidez diferente al aumentarse el espesor de las paredes de los tubos en la parte delantera y en el soporte del amortiguador. La estructura de aluminio aumentó de 4 a 6 milímetros y eso le da mayor dureza. Este cambio permitió cambiar la dureza del muelle del amortiguador trasero, pasando de 54 N/mm a 56 N/mm.
El motor también percibe modificaciones, con una nueva admisión, con una tobera que va desde la caja del filtro a la alimentación, y el conducto de admisión de la culata, más largo y angosto para favorecer la succión a baja velocidad. El cuerpo de inyección es de 44 mm, dos menos que la versión anterior, para mejorar el rendimiento a bajas revoluciones. Según datos oficiales, se mejora el par motor en un 10% a 5.000 rpm, aunque se pierde un 5% de velocidad de punta.