NOTICIAS

Travesías

Travesía al Polo Norte en una Yamaha R1

El aventurero holandés Sjaak Lucassen planea una travesía en moto al lugar más inhabitable de la tierra: el Polo Norte. El osado viajero no planea llegar allí en una adventure bike u otro modelo todo terreno, sino que usará una Yamaha R1 modificada.

Lucassen quiere hacer historia al ser el primero en llegar al Polo Norte verdadero a bordo de una motocicleta. Por supuesto que ninguna moto de serie sería capaz de lograr este objetivo. Es por eso que Lucassen, de 58 años, viene construyendo desde 2016 una moto polar basada en una deportiva Yamaha R1 del 2001, a la que bautizó aRctic1.

La modificación más obvia es el ensanchamiento del basculante y la horquilla para acomodar neumáticos más anchos. Cubiertas con más de medio metro de pisada ayudan a agarrarse mejor en la resbaladiza superficie y a superar las profundas grietas que se encuentran frecuentemente sobre la gruesa capa de hielo.

El manillar fue elevado para facilitar el control de semejante bestia y el radiador fue modificado para evitar que el refrigerante se congele. También se modificaron los carburadores para mejorar su rendimiento a bajas temperaturas. Finalmente, se le instaló un nuevo alternador de mayor capacidad, diseñado para producir más electricidad. Esto se utilizará para alimentar empuñaduras térmicas, el traje calefaccionado y las luces auxiliares.

Lucassen planea comenzar su aventura desde Anchorage, Alaska, recorriendo 1800 kilómetros hasta Tuktoyaktuk, Canadá. La segunda etapa cubrirá más de 2300 kilómetros entre Tuktoyaktuk y Ward Hunt Island, viajando por sobre el mar helado e islas del norte canadiense. La etapa final será completamente sobre el mar helado hasta llegar al Polo Norte.

Lucassen planea llevar a cabo la expedición sin acompañamiento y remolcará un trineo con todos lo necesario para sobrevivir al duro clima ártico. De todas maneras, es posible que cuente con un equipo de respaldo en un vehículo separado y/o algún helicóptero o avión preparado para llevarle suministros o ayuda en caso de necesitarlo. No está del todo planeado como volverá, pero definitivamente no será al mando de la aRctic1. “Si es posible que nos recojan con un avión pequeño, podríamos considerar eso. Otra opción es dejar todo el equipo ahí y que los rusos lo devuelvan cuando abran su base anual llamada Barneo”. ¡Suerte Sjaak!

YouTube player